jueves, 12 de julio de 2012

En soledad...

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“En vano recorremos la distancia que queda entre las últimas sospechas de estar solos”
-José Manuel Caballero Bonald-


Dicen que la soledad, aún la buscada, es como una fría llovizna que termina por calarte hasta los huesos. Aún así, se hace a veces imprescindible para bucear en nuestro interior. Como un ayuno del alma que nos aleja de distracciones y nos permite concentrarnos con la distancia necesaria en el pensamiento siempre clarificador,  y detenernos con la calma precisa en el análisis del sentimiento obnubilador…  porque nunca será lo mismo pensar que sentir, aunque algunos lo perciban de ese modo en una especie de ceremonia de la confusión. Y es que ambos conceptos, pensar o sentir, se contaminan de forma evidente e importante el uno del otro.

Pero...

Pensar,  por lo  general,  sobre todo cuando se trata de decidir algo personal, es la mayor parte de las veces un intento de buscar un equilibrio esquivo e huidizo de per se.  Quizás  el intento más válido de crear nuestra propia realidad desde la objetividad  de un racionalismo que acostumbra a sernos ajeno por contaminación del sentimiento que nos invade,  a veces  incluso a pesar nuestro.

No quiero pasar por alto en este pobre intento de análisis, al que se podrían aportar un montón de matices más, una cuestión que me parece concluyente en este asunto. Y es que dependiendo de la naturaleza propia de cada uno, siempre habrá a quien le pese mucho más a la hora de elegir, pensar que sentir o viceversa. Con la precaución y distancia debidas, que nadie está libre de contradicciones, servidora se sitúa entre los primeros. Tampoco obviaré, algo en lo que muchos de vosotros estaréis asimismo de acuerdo… y es que,  los que somos de tendencia pensativa, podemos abstraernos para reflexionar aún en medio de una multitud.

No obstante, a pesar de esa fama que tiene el “hombre” de animal social, finalizaré diciendo que sin importar la tesitura en que nos hallemos, en el fondo, la soledad es algo inherente al ser humano. Y en algunos, entre los que también me cuento,  además de inherente, aparte “coqueteos”* característico.
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*coqueteos =  dicho en un sentido de “ocasionalmente”. Todos sabemos de algún ejemplar  que bajo una apariencia extravertida, esconde una reserva feroz.

19 comentarios:

  1. Trolling Like Crazy12 de julio de 2012, 14:16

    Dicen los neurólogos que los razonamientos son sólo elaboraciones a posteriori que nos contamos a nosotros mismos para justificar nuestras decisiones. Hay mucho menos de reflexión en nuestros actos de lo que nos gusta creer. El azar, y los instintos más antiguos están con frecuencia en la base de lo que pretendemos son conclusiones razonadas.

    Y la soledad no ayuda a aclarar ese caos: Todas nuestras memorias, conscientes e inconscientes nos empujan sin miramientos cuando pretendemos pensar. Somos calabazas flotando en el río a merced de la corriente. Sólo nos queda la aceptación: dejarnos llevar y convertir ese flujo desbocado en nuestra voluntad.

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  2. Dependiendo de las vivencias de cada uno, la soledad, es algo que puede vivirse desde diferentes ángulos. Yo soy también de los que piensa que estar solo de forma consciente o buscada, es una especie de saneamiento espiritual. Y en según que momentos, nos ayuda a decidir de una forma más lúcida.
    Un placer leerte de nuevo, Cristal.

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  3. Me creí durante un tiempo lo de "ser social". Ahora lo veo bastante borroso.
    Sin embargo, tampoco la soledad absoluta nos lleva al progreso.
    Entre uno y otra vamos dando tumbos, con leves aciertos de vez en cuando.
    Besos

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  4. Curiosa entrada, amiga Cristal, y muy interesante.
    Me adhiero al comentario de Trolling: "la soledad no ayuda a aclarar este caos".
    Y eso es porque la soledad no es válida si no va acompañada por ese baño en "la laguna de silencio" del que he hablado muchas veces. Sin esa laguna necesaria, nuestra soledad se llena aún más con nuestro diálogo interno. Si no hay silencio, nuestro pensar, en soledad o en compañía, es sólo un rumiar lo de siempre, algo que rebota siempre contra la misma pared. Algo que no nos va a ayudar a salir del problema, si es que lo hubiere.
    En soledad se suele pensar mejor, sí, más calmada y pausadamente, pero ese pensamiento está dentro del mismo círculo cerrado en el que estábamos en compañía.
    La auténtica soledad no es estar solos, sino ser solos. Cuestión que nos acerca mucho más a la realidad.
    Es inherente al ser humano, como dices, porque nacemos solos y solos nos iremos, independientemente de quien o quienes nos "acompañen" en esos momentos.
    Tanto la vida como la muerte se componen de hechos y actos puramente personales.
    Retirarse a pensar, para poner orden en la propia vida, es correcto, pero no debemos olvidar que vayamos donde vayamos siempre vamos a estar con nosotros mismos, con nuestros viejos bagajes, con el peso de nuestra experiencia, y eso siempre va a influir en el resultado de nuestro pensamiento, por muy avanzados racionalmente que nos consideremos.

    Pensar o sentir, es igual en el fondo. Son sólo dos maneras diferentes de conectar con el conocimiento. Una está en la mente y la otra en el corazón, por decirlo de alguna manera, pero ambas buscan lo mismo: el saber, el dilucidar, el encontrar el camino.

    Y ojalá (eso te deseo) encuentres con tu pensar una solución a tus problemas, si es que los tienes. Pero intenta pensar a un nivel que supere en algunos grados a tu personalidad, porque si no, como dije antes, todo se queda dentro del mismo círculo de siempre. Un círculo sin salida, como una espiral interminable.

    En todo caso, te deseo lo mejor, amiga hada de Nunca Jamás, porque lo mejor es esa imposibilidad que uno puede convertir en posible. Para lo cual tiene, en principio, que soltar lastre, dejar los cauces habituales de pensamiento o de sentimiento, y atreverse a la posible nueva aventura. Ese nuevo horizonte que puede surgir ante nuestros ojos, si llegamos a saber ver que hay otras cosas, que entre una nube y otra, entre una y otra sombra, hay luces aún por descubrir.

    Un abrazo, Hada.

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  5. Últimamente estoy llegando a la triste y penosa conclusión de que "la tendencia pensativa" no conduce a buen puerto...

    Siempre he defendido la tesis contraria.

    Bello comentario el que te hace Antonio H. Martín.

    Espero, estimada Cristal, que tras pensar y sentir hayas aclarado las sombras que te perturban.


    Otros años, por estas fechas, estabas haciendo planes estivales por esos ámbitos que tanto te agradan y que también conozco. Espero que no hayas perdido esta buena costumbre...

    Un fuerte abrazo y muchos ánimos

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  6. Y hay soledades y soledades... Pero el encuentro con uno mismo es la mayor de todas. Y la más necesaria.

    Te quiero darling***

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  7. Sola,acompañada o en multitud, siempre serás una cabeza pensante. Creo que no lo puedes evitar, jeje
    Como tú dirías, me encantan tus 'ollas'. Pero yo soy de los otros, de los que llegan a su realidad a través del sentimiento.
    Un besazo.

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  8. No estoy muy de acuerdo en esa dicotomía entre seres "pensantes" y seres "sensibles" aunque tu misma reconoces esa contaminación mutua, yo creo que estamos hablando de dos sustancias que al final confluyen en la misma cosa: la conciencia. La conciencia no distribuye las tareas entre sentidos y mente, la conciencia es única o si caso como el núcleo del átomo está compuesta de protones pensantes y neutrones sensibles o viceversa, no lo sé.
    La soledad es una forma de autoafirmación de la conciencia donde todo lo demás -que sigue existiendo- queda detrás, como un primer plano fotográfico tras un fondo borroso. En realidad no existe esa soledad ya que el hombre no es un ser único y vive conectado al resto de los seres le guste o no le guste. Cuando nos sentimos solos estamos sobredimensionando la propia conciencia que tiende a engañarnos haciéndonos pensar que nos liberamos del resto, algo que solo es producto de la sugestión o de la necesidad de supervivencia del propio yo.

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  9. Hola, *Trolling*:

    Daremos como bueno tu sinónimo de razonamiento por pensamiento, aunque según la RAE, haya un leve, muy leve, matiz que los diferencie. Pero si que hay mucho trecho entre "pensamiento" y "sentimiento" en las definiciones de la Real Academia. Tanta, que la tercera acepción de "sentimiento" recoge la idea, de que "sentimiento" es la parte del ser humano opuesta a la inteligencia o razón. Pero haremos caso al empirismo de los científicos, porque acostumbran a saber de que hablan y lo que dicen. Eso sí, también ellos se incluirán en su propia teoría. Supongo.

    Es decir, que su razonamiento,quizás sea esa elaboración a posteriori que se han contado a si mismos, para justificar sus reflexiones a este respecto :)) ¿no? Está claro, que el subjetivismo es inevitable al verter opinión, sin importar el tema que nos ocupe.

    Podríamos también hablar de "pensamiento inductivo o deductivo" hasta de Leibniz y su "principio de razón suficiente"(interesantísimo, por cierto) pero estaríamos en las mismas. Porque tanto Leibniz, como los neurólogos o tú, o yo y todos... somos humanos con nuestras elaboraciones "a posteriori". Para las que vienen de perlas, al menos en el caso de esta "calabaza" y que me perdonen los neurólogos, la soledad, que me fascina desde que recuerdo. Ya ves.

    No había en mi entrada un ánimo de pontificar en absoluto sobre el tema, era sólo una breve, y ya digo en la misma, que "pobre análisis" sobre esa dicotomía que incumbe al ser humano, por el sólo hecho de serlo. Pensar y sentir, también lo digo en el texto, se contaminan de forma importante.Quería referirme sobre todo, a las tendencias de cada uno. La mía queda clara donde me sitúa.
    Pero me encanta el matiz y el "meneo" que le has dado a mi entrada, amigo Trolling, así que muchas gracias por acercarte y dejar aquí tus "elaboraciones a posteriori" jeje. Te espero.

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  10. Godot:

    Pues no me sorprende y me alegra saberte entre los pensadores, amigo Godot. Se nota en tus comentarios, lo que no nos resta un ápice de sensibilidad ¿a qué sí?
    Pues eso, y un abrazo.

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  11. Virgi:
    Tu comentario me parece una sabia mezcla y búsqueda de un equilibrio, que parece que por el momento, nos cae lejano. La vida, tiene un mucho de "ley del péndulo" y estar en el medio es ciertamente difícil, porque la oscilación es casi permanente.
    En fin! intentarlo es lo que vale ¿verdad?
    Un beso y gracias por acercarte.

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  12. Hombre, Sr. Druida:

    Largo y espeso comentario me obsequia en esta breve entrada. Lo que le agradezco porque al igual que el amigo Trolling,y otros comentaristas, la complementa de forma importante. Lo que siempre es de agradecer.

    Eso sí, sería raro que coincidiésemos en algo vd. y yo jeje. Pero también como siempre, no andamos tan lejanos en nuestras posturas.

    Dices que no hay lucidez para decidir, si la soledad no va acompañada de algo que calificas como "la laguna del silencio" y entiendo bien a qué te refieres. De hecho, la soledad acostumbra a ir acompañada de esa laguna, pero los habemos, dime rara... que somos capaces de sentirnos solos, aún en la mejor compañía o en medio de esa multitud que cito en mi texto. Sea por capacidad de abstracción o por lo que sea. Cada uno... ¿verdad?

    Pero sí coincido contigo plenamente e incluso que creo que me das razón, cuando dices:
    En soledad se suele pensar mejor, sí, más calmada y pausadamente, pero ese pensamiento está dentro del mismo círculo cerrado en el que estábamos en compañía. (por eso digo que aún en medio de la multitud o del ruido extremo, algunos podemos pensar)
    La auténtica soledad no es estar solos, sino ser solos. Cuestión que nos acerca mucho más a la realidad.
    Es inherente al ser humano, como dices, porque nacemos solos y solos nos iremos, independientemente de quien o quienes nos "acompañen" en esos momentos.
    Algo que me atrevo a decir que he escrito, casi de forma idéntica, en más de una ocasión en este espacio. Quizás en aquellas entradas de "dragones y destellos" :))
    Pero sea como sea, me remitiré de nuevo a la epistemología de la RAE, como en el caso de Trolling y te diré que para nada es igual "pensar" que "sentir".
    Si escojo la segunda acepción de la RAE sobre pensar dice lo siguiente:
    Examinar algo en la mente antes de tomar una decisión o darle una solución. (escojo esta por que me parece que es la que hace al caso en mi texto)
    Y si escojo la de "sentir", me remite a "sentimiento" del que escojo la tercera, como en el caso de Trolling. Dice:
    Parte del ser humano opuesta a la inteligencia o razón.
    Luego entonces, según mi personal modo de verlo, tan legítimo como el vuestro... aunque no coincidamos, conectar con la realidad nunca será la mismo a través del sentimiento que del pensamiento. Creo que ni siquiera parecido.
    En todo caso lo único que importaría aquí, también en mi opinión, es la libertad de hacerlo de una u otra forma. Por eso te decía más arriba que "cada uno"... se sitúa donde le parece más acertado.
    Por lo demás, gracias también a ti, por tu estupendo comentario lleno de ideas y matices.

    Un abrazo, Antuán.

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  13. Querido Luis Antonio:

    Ni inconvenientes, ni un año de dificultades y algunas ausencias notables, me hará suspender mi cita con Gúdar, que ya estoy preparando con ilusión y cuidado.
    La verdad es que pensar, a veces, se hace oneroso, porque nos enfrenta a nuestro yo más auténtico. Y no siempre nos gusta lo que vemos o descubrimos :) ¿verdad? Pero hay ocasiones en que se hace imprescindible el abordarlo. Sobre todo, si queremos avanzar con un mínimo de lucidez. En mi caso por lo menos. Aunque habrá quien esté en posesión de un pensamiento intuitivo y lúcido de per se, y no lo necesite... pero repito que no es mi caso.
    Y sí,aunque no deje de ser una percepción a distancia, también te veo a ti, más de tendencia pensativa que sensitiva :)).
    Pues eso. Y bienvenido al club.

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  14. Isis:

    En pocas palabras, lo has dicho todo.
    No hay nada como entenderse, diosa.
    :):)
    Todo un privilegio el encontrarnos en este Universo.

    Un abrazo fuerte, fuerte.

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  15. Yo estoy tan enamorado de mi soledad, que cuando alguien pretende interponerse entre nosotros me asusto y salgo corriendo.

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  16. Krapp:

    A pesar de posibles matices, no creo que andemos tan lejos en el fondo del texto de esta entrada. Sobre todo cuando dices:

    "La conciencia no distribuye las tareas entre sentidos y mente, la conciencia es única o si caso como el núcleo del átomo está compuesta de protones pensantes y neutrones sensibles o viceversa, no lo sé."

    También tú de algún modo, aunque entiendo que distinto, estás "dividiendo" en categorías la forma de abordar lo que sea que hayamos decidido "dirimir".

    Sólo digo que dependiendo de la naturaleza de cada uno, se tendrá más una tendencia que la otra. Pero sí, desde luego que la conciencia es única y tal como dices tú y también yo... ambos conceptos se funden o se contaminan el uno del otro de forma importante.

    :)) Gracias por acercarte de nuevo.

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  17. Susanita:

    Ups! casi te "salto" jeje.

    Sé bien de tu forma de enfocar los asuntos. Pero a pesar de ese peazo corasón que me gastas... tiene vd. una cabeza pensante muy, pero que muy bien amueblá. Me consta!

    Pues eso y un beso!

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  18. Coquito

    La soledad es como el chocolate. En según que casos y momentos se torna totalmente adictiva. Es lo que tienen ambas cosas.

    Por otra parte, a un marathon-man de tu categoría, lo de salir corriendo, no es que le cueste mucho ¿no? :))

    Y puede vd. decirme que me adora cuantas veces quiera Sr. Coquito de mi corasón. Faltaría más!

    Mua!

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matices varios

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